Un capítulo más de la serie de proyectos presentados en las III jornadas en la UAM. Se trata de una iniciativa innovadora realizada en Larrabetzu (Vizcaya) realizado por nuestro compañero DILAS. La intención de incorporar los restos orgánicos dométicos al ciclo de la producción agroecológica, realizada por agricultores locales es otra de las estrategias que desde TERRAE se vienen planteando en la incorporación de la economía circular del ciclo orgánico.
El proyecto tiene como objetivo apoyar la creación de empleo en el sector agrario local mediante el aprovechamiento de los restos orgánicos domésticos y comerciales, que hasta ahora se llevaban a la incineradora.
Consiste básicamente en:
- Familias y comercios separan sus residuos orgánicos y los dejan en un cubo individual junto a su portal los lunes, miércoles y viernes.
- Nuevos agricultores locales los recogen y los llevan a sus tierras, donde los compostan para uso propio.
- El Ayuntamiento paga al agricultor por el servicio. Este ingreso complementario le ayuda para arrancar en su actividad.
La experiencia piloto comenzó en octubre de 2013 con 1 agricultor, 30 hogares y 1 tienda de alimentación.
En junio de 2016 ha crecido hasta 4 agricultores-as, 189 hogares, una tienda de alimentación, una frutería y cuatro bares-restaurante. Se ha alcanzado la participación de más de un tercio de los hogares del núcleo urbano, ámbito de la iniciativa. Y sigue aumentando.
En el siguiente vídeo se muestra como se gestiona la materia orgánica que se genera en Larrabetzu, todo el proceso se realiza en el mismo pueblo, eliminando costes de transporte, eliminación y vertido, reduciendo el impacto ambiental y constituyéndose en una fuente complementaria de ingresos para el sector primario local.
Aquí puedes consultar la presentación completa realizada en la UAM.
En el ejercicio de autoevaluación que nos planteamos podríamos decir que este proyecto hasta el momento ha tenido:
Como Fertilizantes, o factores que son precisos para vitalizar este trabajo de dinamización:
- El trabajo y la constancia del grupo impulsor de la idea: Gurpide, Asociación de agricultores-as y consumidores-as de Larrabetzu
- El respaldo y apoyo económico recibido del Ayuntamiento y, para la compra de materiales (cubos, contenedores, compostadores comunitarios), de la Diputación.
- El interés de los agricultores implicados en la recogida y tratamiento.
- La buena acogida encontrada entre las vecinas y vecinos.
Como control de plagas, riesgos, puntos críticos, alertas que son necesarios considerar en este trabajo de dinamización:
- Contención del gasto.
- Normativas centralizadoras que podrían dificultar la gestión local de los residuos.
- Cumplimiento adecuado del servicio de recogida a los vecinos.
- Gestión ambiental correcta de los residuos: sin olores, lixiviados ni proliferación de animales.
Como semillas, o claves para mantener la identidad local, elementos que garantizan la transferencia y la continuidad de este trabajo de dinamización:
- Balance económico viable, con gastos inferiores al modelo convencional.
- Interés de todas las partes (grupo promotor, Ayuntamiento, agricultoras, vecinas y vecinos) por continuar, no por militancia sino por solvencia de la idea.