El día 23 de enero de 2013 tuvo lugar en el Salón del Plenos del Ayuntamiento de Buitrago del Lozoya (Madrid), la reunión de la Red TERRAE, a través de los Comité de Pilotaje y Técnico formados por los municipios de Buitrago del Lozoya y Redueña (Madrid), El Campillo de la Jara (Toledo), Carcaboso (Cáceres) y la Mancomunidad de Municipios Sostenibles de Cantabria, con el objetivo de planificar las fases de gestión del Proyecto “CONTRATOS TERRAE: Custodia del Territorio e Iniciativas de autoempleo agroecológicas”, iniciativa apoyada por la Fundación Biodiversidad.
Este encuentro ha servido para planificar y debatir las distintas acciones a implementar en los territorios integrantes de la Red TERRAE que participan en este proyecto, que da continuidad a la primera fase de la Estrategia de Desarrollo Territorial “Territorios Reserva Agroecológicos” basada en la gestión del Banco de Tierras Agroecológicas.
Los municipios TERRAE, van a disponer de todo el año 2013 para ensayar y pilotar el diseño y consolidación de contratos de custodia agroecológicos (Contratos TERRAE), capacitar a los técnicos locales como Dinamizadores de Iniciativas Locales Agroecológicas (DILA´S), crear una comunidad de mentores y voluntarios agroecológicos, ampliar y consolidar la Red a otros municipios y a otras comunidades autónomas.
Red Terrae es una asociación de municipios abierta a la participación que apuestan por generar conciencia agroambiental, como base para el desarrollo rural de sus territorios y al mismo tiempo impulsar un cambio de cultura hacia un consumo responsable por productos saludables, basados en vínculos de confianza entre productor y consumidor.
Los resultados del proyecto se verán reflejados en la creación de una Marca TERRAE que homologue productos, contratos e iniciativas agroecológicas, en la creación de una nueva figura de promoción agroecológica (DILAS), en la ampliación del Banco de Oportunidades a través de la gestión de la Comunidad de conocimientos, en la custodia y conservación de los valores ambientales (biodiversidad, naturalidad y reducción de emisiones), culturales y sociales del paisaje rural, asegurando las buenas prácticas en las producciones y consumo de alimentos y sobre todo en la generación de autoempleo agroecológico.